Esa misma semana, después del estudio de la cuenca hidrográfica que engloba la zona, se determinó el número de vuelos a realizar y se dividió en dos días de trabajo en campo para obtener las imágenes en las mejores horas del día (cuando el sol está más alto).

Se establecieron más de 100 puntos de Apoyo distribuidos uniformemente a lo largo de la zona y se tomaron las imágenes nadirales con una resolución de aprox. 3 centímetros a 120 metros de altura.

Posteriormente, en gabinete, se procesaron todos los vuelos realizados, obteniendo cada una de sus nubes de puntos, ortofotos, Modelos Digitales del Terreno y curvas de nivel. Para la obtención de cartografía 3D de máxima actualidad se realizó una Restitución Cartográfica de precisión con software específico y gafas NVIDIA de visión 3D, donde se cartografiaron más de 200 hectáreas de suelo rústico.

Una vez definidos todos los elementos, se unieron para entregar el producto final con precisiones absolutas en el ajuste de +/- 2 centímetros en X e Y y < 5 centímetros en cota. Todo ello en un tiempo récord de 1 semana, agilizando así el proyecto y permitiendo a la ingeniería proseguir con sus labores de Redacción y actuación.